Mash es una marca francesa especializada en motocicletas con un claro estilo Vintage que está teniendo un importante éxito en el mercado español con precios asequibles y productos de gran carácter.
El nuevo producto que ofrece ésta Marca es la Dirt Track 6,5, que es una recreación de las motocicletas de los 80 y/o 90 que corrían en las carreras AMA sobre tierra batida y generaban auténtica atracción a los aficionados.
El atractivo y muy personal diseño retro de la Dirt Track 6,5 se completa con un precio más que asequible de 5.595 euros.
La moto más potente de Mash
La Dirt Track 6,5 cuenta con un motor con cuatro tiempos con refrigeración aire/aceite e inyección electrónica, que precisa muy poco mantenimiento también debido a su sencillez y durabilidad, lo que le aporta una posibilidad de utilización tanto lúdica como en ciudad, y le dota de una consideración de moto muy polivalente o para uso de fin de semana.
Su motor de 649 cc entrega 40 CV de potencia a 6.000 rpm, con una caja de cambios de 6 velocidades, consigue un par perfecto e idóneo para cualquier tipo de recorrido, sin producir los bien conocidos tirones innecesarios que podrían dañar la cadena.
Diseño y conducción
Se trata de una moto versátil, ágil, manejable y muy cómoda de conducir en cualquier recorrido corto o largo y, sin duda, no es ni pretende ser una moto de carreras. Tiene una distancia entre ejes de tan sólo 1,22 m lo que nos habla de su importante y facilitada manejabilidad.
A ello se le añade un chasis tubular de acero, del tipo convencional, apoyado en una horquilla telescópica invertida en el eje delantero y en dos amortiguadores de gas alojados en el basculante y en el eje trasero.
Ésta ya histórica combinación entre amortiguaciones y el chasis se podría considerar muy tradicional y poco moderna, pero también es cierto que se consigue así una excelente adaptabilidad de la moto sobre cualquier superficie.
Muy bien estudiada en ésta Mash Dirt Track 6,5 la posición del piloto que es, sin duda, muy relajada y favorecida por su amplio manillar algo más alto de la habitual actualmente, aportando una gran sensación de equilibrio. Y es precisamente ésta sensación la que la dota de un excelente motivo para su uso en situaciones de tráfico lento y denso en ciudad, sin crear el más mínimo problema de control o ineficacias de conducción.
Su agilidad en carretera, incluidos tramos muy virados, viene conseguida por su diseño muy compacto y su escaso peso (sólo 163 kg) y se acompaña por las reacciones realmente elásticas de su motor que ayudan mucho a la efectividad de las trazadas y que absorben cualquier error que se cometa en la conducción tanto en entrada como en salida de curvas y/o en las evoluciones de conducción.
Para completar el súper noble comportamiento de ésta motocicleta, cuenta con un sistema ABS (desconectable para aquellos que busquen mayores sensaciones), que actúa sobre el disco delantero con pinza radial de cuatro pistones, y se apoya en un disco trasero simple.
Es una moto muy personalizada ya desde origen con una imagen muy reforzada por sus pequeños guardabarros, un depósito no extremadamente grande (13 litros) y un asiento muy cómodo para 2 personas a 78 cm de altura que se remata con un pequeño colín que contiene la luz de freno. Todos estos detalles junto a las tapas laterales porta-números decoradas con la bandera norteamericana, dotan a esta motocicleta de una imagen y un carácter muy original, retro pero práctico.
La Mash Dirt Track 650, no dispone de ningún tipo de espacio para almacenamiento o para guardar el casco. Como mucho una mini guantera para introducir documentación y un par de guantes, si bien en este tipo de motocicleta no parece que sea necesario ya que ha sido diseñada para mostrarse y gustar, cosa que se consigue sin duda.
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