Radares pedagógicos de la DGT

Radares pedagógicos de la DGT
3 Min de lectura
Facebook
WhatsApp
Email
LinkedIn
Twitter

Cuando multar no es el objetivo, entran en acción este tipo de radares, llamados pedagógicos, cuya función es educar a los conductores para que reduzcan la velocidad en determinadas zonas urbanas.

Resumen del contenido

  1. Descripción de los radares educativos
    1. Fuente: Motor Mundial
  2. Estrategia de medidas disuasorias y radares de la DGT
  3. La función pedagógica y disuasoria de los radares
Reading Time: 3 minutes

Empieza a ser muy común encontrarse con otro tipo de radares, tanto en ciudad como en carretera, cuya misión no es multar por infringir las velocidades permitidas, sino ir educando para conseguir que los conductores adapten sus velocidades en determinadas zonas de las ciudades principalmente. Se trata de los denominados “Radares pedagógicos”

Es cierto que la tendencia de todos los usuarios y ciudadanos es pensar que el objetivo de las autoridades de tráfico es la recaudación fundamentalmente, si bien la instalación y crecimiento de este tipo de radar pedagógico demostraría que el verdadero objetivo es la reducción de la accidentalidad, por la vía de la educación.

Evidentemente, no todo iban a ser sanciones y penalizaciones, ya que algunas instituciones locales ya apuestan cada vez más por soluciones más educativas como son estos “Radares pedagógicos”.

Descripción de los radares educativos

Prácticamente todos los conductores se han encontrado ya con radares que, a través de una señal luminosa y una caja bien visible, muestran la velocidad a la que se circula.

Salvo que junto a ellos se encuentre una señal que indique potenciales sanciones, estos mecanismos no sancionan a los conductores en principio, ya que no suelen disponer de sistemas de cámaras para identificación de matrículas ni tampoco de los sistemas de conexión necesarios para tramitar y/o emitir multas.

A través de diferentes estudios, se ha demostrado que los conductores tienen tendencia a desacelerar ante la visualización directa de la velocidad a la que se circula, mejorando en consecuencia la posibilidad de obtener el objetivo de reducción de accidentes en todo tipo de vías.

Por ello la presencia de los “radares pedagógicos” es muy superior en vías urbanas para extremar la precaución fundamentalmente en zonas de alta presencia de niños o zonas escolares…

Además, para llamar la atención de los conductores, añaden en algunos casos mensajes a través de una pantalla del tipo “reducir velocidad” (en el caso de estar superando los límites) o “Atención zona escolar”, pudiendo también informar de otras incidencias de tráfico necesarias.

Es un sistema mucho más amable para ayudar en la concienciación de los conductores en cuanto a velocidades sin necesidad generalmente de la utilización de medidas mucho más agresivas como bandas sonoras, desniveles, pasos elevados, etc.., y cuyos beneficios son los siguientes:​

  • Producen reducciones de velocidad notables en los lugares de instalación, mejorando así la seguridad vial.
  • Muestran la velocidad de cada vehículo que circula por el lugar de instalación, lo que produce estudiadas reducciones en la velocidad de circulación.
  • Son un arma perfecta para controles en zonas de afluencia de tráfico importante.

Muchos de los “Radares pedagógicos·” contienen también un software específico para poder almacenar y analizar datos importantes de tráfico, tales como velocidades medias y máximas, cantidad de vehículos que pasan por el punto en cuestión, así como análisis de los diferentes horarios. Estos datos son fundamentales para las administraciones locales en general para tomar decisiones que ayuden a mejorar accesos y tráfico en las ciudades.

Fuente: Motor Mundial

Estrategia de medidas disuasorias y radares de la DGT

Se siguen instalando en las carreteras españolas nuevos radares con la intención de incrementar el volumen de detecciones para mejorar las velocidades, fundamentalmente en carreteras secundarias ya que de los datos de accidentalidad en los últimos años se deduce que éste tipo de carretas son las que se vienen cobrando mayor número de vidas y cantidades de accidentes cada año.

Por supuesto, la DGT, sigue con sus procesos de implantaciones para perseguir los excesos de velocidad, tales como trípodes, señales verticales, vehículos camuflados, radares muy compactos que se acoplan a guardarraíles y radares de tramo.

Mención aparte merece reciente puesta en marcha de los Drones de la DGT, que aun no contando de momento con radares de velocidad, se empiezan ya a utilizar para otro tipo de infracciones que se producen en las carreteras que vigilan con gran precisión.

La función pedagógica y disuasoria de los radares

El aporte principal a la seguridad vial de los “radares pedagógicos” es su inherente consecución en cuanto a que los conductores desaceleren al ver directamente la velocidad a la que circulan y si dicha velocidad es superior al límite.

De todas formas, la DGT está utilizando otras actividades disuasorias para conseguir evitar velocidades excesivas fuera de los límites.

Como ejemplo, la Dirección General de Tráfico recientemente ha explicado que aproximadamente una tercera parte de los radares convencionales que nos encontramos por las vías y carreteras españolas, son cajas que no cuentan con los sistemas de radar (cámaras, detectores y sistemas de transmisión), y por lo tanto son incapaces de emitir sanciones y cursar las mismas, pero cumplen con la misión fundamental de producir reducciones de velocidad en el tramo.

Calcula tu seguro ahora

Elige otro seguro a calcular:

null

Comentarios (0)

Suscríbete a nuestro boletín

Suscríbete a nuestro boletín

Suscríbete
La App de seguros mejor valorada

La App de seguros mejor valorada

Descúbrela