Los amortiguadores de dirección en cierta medida funcionan como el sistema de suspensión de una moto, un coche o cualquier otro vehículo. La gran diferencia es que, tanto su acción como su ubicación, recaen sobre las ruedas delanteras y la dirección del vehículo.
¿Para qué sirven los amortiguadores de dirección?
Permite evitar la pérdida de control sobre la dirección del vehículo que se produce cuando la rueda delantera se queda sin contacto con el suelo y la inercia se apodera de tu moto. El amortiguador de dirección evita que el piloto pierda por completo el control sobre su vehículo, cuando el tren trasero por diferentes deja de tener contacto con el suelo.
- Los amortiguadores de dirección son habituales en motos deportivas y también en las de trial.
- Los vehículos preparados para circular por terrenos no convencionales también suelen incluirlo.
- Regula el movimiento de la dirección en sentido horizontal, de lado a lado.
- Evita efectos peligrosos como el shimmy que provoca que el conductor pierda el control de la dirección e incluso, la capacidad de frenado.
- Mientras que en una moto la horquilla y el amortiguador trasero controlan el movimiento vertical que tienen las ruedas, con el mismo sistema los amortiguadores de dirección hacen lo propio con el horizontal.
- Los amortiguadores de dirección se entienden como estabilizadores de dirección para momentos concretos.
¿Cómo funciona el amortiguador de dirección?
El amortiguador está compuesto por una estructura que en su interior está dividida en sus cámaras comunicadas entre sí por dos orificios. Estos huecos albergan un fluido y permiten que este pase de un lado a otro. Dentro de uno de los huecos hay un vástago con un pistón que se desplaza de un lado a otro.
Esta pieza entra en acción, cuando la dirección empieza a moverse de un lado a otro sin control para paliar esta situación y minimizar sus consecuencias. El pistón interior se desplaza de un lado a otro empujando el fluido que pasa a través de los agujeros que ofrecen una resistencia por compresión en función de la velocidad a la que se produce. Esto mitiga las sacudidas del manillar, lo que favorece que el control de la dirección se vuelva más sencillo evitando un posible accidente.
Situaciones en las que es útil el amortiguador de dirección
- Terreno con desniveles en los que a menudo las ruedas pierden fricción con el suelo.
- Conducción a altas velocidades
- Golpes fortuitos de la rueda delantera que le hacen perder contacto con el suelo y caer no en posición totalmente recta.
La pérdida de control de la dirección no es nunca una experiencia deseable y cuando vas sobre dos ruedas, menos; el amortiguador de dirección entra en acción precisamente en estos casos y minimiza o evita completamente este tipo de efectos tan peligrosos que a menudo acaban como mínimo en caída.
Tipos de amortiguadores de dirección
En el mercado puedes encontrar diferentes tipos de amortiguadores de dirección y diferentes marcas. Destacan entre los fabricantes los amortiguadores de dirección Ohlins que son los más populares, pero no son los únicos.
- Se recomienda apostar por los regulables para que puedes controlar su función dependiendo del tipo de terreno por el que transites o la velocidad. Se montan de forma transversal sujetos al chásis y la parte superior de la tija. También puedes encontrarlos anclados igual, pero de forma longitudinal por el interior.
- Electrónicos. Son los más innovadores y varían su función dependiendo de la velocidad a la que ruedes, lo que les haces hace muy eficientes al adaptarse al tipo y forma de circular.
¿Es recomendable instalar el amortiguador de dirección?
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Las motos de más potencia llevan de serie este elemento para mejorar las condiciones de manejo y aumentar la seguridad. Sin embargo, si tu vehículo no lo incorpora es posible que puedas ponerlo posteriormente acudiendo a tu taller de confianza.
Si estás pensando en instalar amortiguador de dirección, es importante que te asesores para elegir el más adecuado a tu forma de conducción y a tu vehículo. El precio de la pieza y la mano de obra varía en función de cada caso, pero calcula que es una modificación que puede rondar los 1.000 euros.
Los amortiguadores de dirección mejoran la seguridad y minimizan las probabilidades de caída o accidente en las situaciones de pérdida de control de la dirección; sin embargo, no son elementos infalibles y si finalmente el siniestro se produce, solo contar con el mejor seguro de moto te permitirá salir de la mejor manera y sufrir lo menos posible las consecuencias.
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