Es posible que tu coche vea y frene por ti cuando un peatón, por ejemplo, se cruza en tu camino. Las alarmas anticolisión te avisan a tiempo y los sistemas más avanzados llegan a detener el coche, aunque tú no hagas nada. No es cosa de magia.
¿Para qué sirven los sistemas anticolisión?
Dentro de los sistemas de ayuda a la conducción – ADAS – que mejoran la seguridad y la comodidad al volante, están los sistemas anticolisión para evitar choques fortuitos entre vehículos o con otros usuarios de la vía como motoristas o peatones.
Las diferentes marcas de coches han implementado sus propios sistemas con el fin de evitar colisiones. Con algunas diferencias, la esencia de todos ellos es la misma: contribuir a que las colisiones en la carretera y en las calles desparezcan, cubriendo posibles despistes, distracciones o faltas de atención del conductor.
Las nuevas tecnologías, particularmente los sensores, y los sistemas inteligentes de asistencia que viajan a bordo de los coches más innovadores, forman parte de la asistencia que evita los choques.
Tipos de sistemas anticolisión
Si vas a comprar un coche nuevo, tendrás a tu disposición diferentes sistemas incluidos en la oferta de ayudas a la conducción. Cada fabricante ha puesto nombres distintos a este tipo de sistemas. En el caso de los que evitan las colisiones, hay diferentes tipos que implican más o menos actuación autónoma del coche ante la posibilidad de que se produzca un choque, desde el aviso al conductor, hasta corregir la dirección y frenar, aunque el conductor no haga nada.
Alarma anticolisión frontal
Las alarmas al conductor son el sistema más básico dentro de las ayudas a la conducción. Es el primer recurso con el que cuenta un coche para evitar que te choques. Por lo general, el vehículo está equipado con sensores y cámaras que analizan en todo momento la situación del tráfico y todo lo que rodea al vehículo para hacer saltar las señales de alarma cuando el escenario lo requiere.
Si el coche cuenta con alarma de colisión frontal, antes que incluso el conductor más atento pueda reaccionar, el vehículo ya habrá deducido el peligro inminente y avisará mediante señales acústicas y/o luminosas con suficiente tiempo para que sea el conductor el que tome la decisión de parar, bajar la velocidad o cambiar la dirección para evitar la colisión.
El sistema de aviso -alarma- tiene como misión hacer reaccionar al piloto, llamar su atención e informarle de lo que está pasando o puede suceder de manera inminente: colisión, pero no actúa, deja la total responsabilidad al conductor que es el que toma la decisión.
Las alarmas anticolisión frontal, dependiendo del número y tipo de cámaras y sensores; serán capaces solo de detectar coches u otros vehículos o también, otros usuarios de la vía como peatones o ciclistas, por ejemplo. Siempre elementos u objetos que estén delante del coche, puesto que se trata de una alarma frontal.
Un ejemplo de coche que ofrece el sistema de detección de peatones es el RAV4 de Toyota. En este caso se incluye dentro del Sistema de Precolisión y emplea una cámara frontal y un radar para detectar objetos. Cuando hay posibilidad de colisión, avisa al conductor con señales sonoras y visuales.
Alarma anticolisión posterior
Los sistemas para evitar los choques por alcance -traseros- no son tan habituales y en muchos casos son extras según el modelo de coches y suelen estar incluidos en las gamas superiores y paquetes Premium de seguridad y ayuda.
Para detectar qué está ocurriendo en la parte trasera y fuera de tu coche, el vehículo necesita incorporar cámaras y sensores en la zona trasera del coche. Es el tipo de elementos que llevan los coches que incorporan, por ejemplo, el asistente de aparcamiento.
En el caso de ir equipado con alarma anticolisión posterior, el vehículo avisará mediante alarma visual y/o sonora, y en muchos casos apoyado por imágenes de la cámara posterior en el equipo multimedia del coche. La alerta saltará, por ejemplo, si un coche se acerca al tuyo a gran velocidad y el sistema calcula que no podrá parar a tiempo sin tocar tu coche.
Sistema de precolisión
Los sistemas de avisos y alarmas son sistemas de precolisión: actúan como vigilantes y alertan antes de que el choque se produzca, anticipándose al posible siniestro y avisando de lo que ocurre al piloto.
Son muchos los vehículos que ya incorporan este tipo de sistemas de aviso que se definen como de precolisión. Según la tecnología desarrollada por el fabricante, este tipo de asistencias a la conducción se materializan en forma de avisos visuales sobre la pantalla o el cuadro de mandos o con alertas sonoras que ponen en alerta al conductor. También hay sistemas que incorporan ambos tipos de alarmas.
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Sistema inteligente anticolisión
Los vehículos más completos disponen de sistemas inteligentes anticolisión que cuentan con 3 niveles de actuación:
- Alertan para que sea el conductor el que evite el choque
- Asisten en las maniobras que el piloto decida hacer como frenar o cambiar de dirección.
- Actúan de forma autónoma si el conductor no ofrece respuesta a la señal de alarma.
La secuencia de actuación de un sistema anticolisión se debe producir en cuestión de segundos:
- Análisis y detección: el coche detecta el peligro de colisión, envía las alarmas previstas.
- Asistencia al conductor: si el conductor responde, ayuda frenando al máximo o corrigiendo la dirección hacia la posición que el conductor marca.
- Respuesta automática: si no hay respuesta positiva del piloto, el propio coche acciona los frenos para evitar un choque.
El sistema inteligente para evitar colisión más completa incluirá todas las posibilidades desde la alarma hasta la respuesta automática y detectando no solo vehículos, sino cualquier tipo de elementos.
Si te interesa contar con estas asistencias, infórmate al comprar tu nuevo coche y pide que te expliquen el tipo de sistema que incluye el coche que te interesa. Para que las cámaras y sensores de estas ayudas queden cubiertos frente a golpes accidentales o en caso de graves siniestros, elige una póliza completa y adecuada para asegurar tu coche.
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