Los vehículos actuales cuentan con múltiples sensores que ayudan al correcto funcionamiento de todos los sistemas del coche. El sensor MAP es uno de los sensores que ayudan a controlar la cantidad de aire que se permite entrar para que se realice correctamente la mezcla con el combustible.
¿Qué es el sensor MAP y cuál es su utilidad?
El sensor MAP (“Manifold Absolute Pressure”), es decir “sensor de presión absoluta del Múltiple” en español, y se encarga de mantener el control de la cantidad de aire que se permite entrar al motor.
Su función es medir constantemente el volumen de aire en el colector de admisión para así permitir una correcta mezcla de combustible y oxígeno en la cámara de combustión del motor, de manera que este realice de forma adecuada el proceso de ignición.
Su funcionamiento se basa en la medición de la presión barométrica del ambiente junto a otras que realiza el ordenador de a bordo, indicando así al sensor MAP cuál es la cantidad de aire que puede dejar pasar por el motor.
Además, el MAP indica a la centralita del motor la cantidad que debe dejar pasar, de manera que la misma calcule cuanto combustible se debe inyectar para así realizar la mezcla óptima necesaria.
Ubicación y funcionamiento del sensor MAP
El sensor MAP se conecta con el múltiple de admisión del motor mediante una manguera y se encuentra dentro del compartimento del motor tras la mariposa de admisión. Funciona de forma sincrónica con el sensor de posición del cigüeñal.
El MAP se activa cuando el aire recorre la mariposa de aceleración y mide la presión del aire del múltiple de aceleración, mandando la señal al ordenador del vehículo.
Con esta señal, la ECU consigue calcular la cantidad de aire que está entrando en la admisión (fórmula matemática que establece la relación existente entre la presión del colector y la velocidad del motor), determinando así la cantidad de combustible que debe inyectar en la cámara de combustión en todo momento de forma eficiente.
En su interior, el sensor MAP tiene unos cristales de silicio que son muy sensibles a la presión del aire, y que operan mediante la conexión al colector del MAP, que es el lugar donde se toma y mide la presión del vacío, produciendo una dilatación física del MAP cuando esta presión de aire ingresa en la cámara interna del mismo, siendo esta dilatación la que se convierte en una señal eléctrica que se envía directamente al ordenador del vehículo.
Fuente: revista Motor Mundial
Es importante explicar también que el sensor MAP trabaja en conjunto con otros muchos sensores (IAT, ECT, MAF, TPS …), para así proveer de información al ordenador de abordo para un correcto y optimizado funcionamiento del motor en todo momento.
Tipos de sensores MAP
Son dos los tipos de sensores MAP que actualmente montan los vehículos:
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Sensor MAP por cambio de frecuencia, que mide la presión absoluta que existe en el motor y la presión barométrica (con el motor apagado), para así calcular la cantidad de aire que existe en el colector.
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Sensor MAP por variación de voltaje que mide el vacío que producen los cilindros del motor, siendo el mismo el que produce una resistencia en el sensor y a su vez lo envía a la centralita.
Posibles fallos del sensor MAP
Son los siguientes contrastados:
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Fugas de vacío: Envía señales que no son correctas por su funcionamiento inadecuado.
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Problemas de instalación o desinstalación que al ser muy delicado podrían haber dañado componentes eléctricos.
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Humedad en el sistema de admisión: Puede producir averías en sus componentes internos.
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Daños en el cableado que lo conectan a la centralita: Impiden que el ordenador del vehículo reciba señales adecuadas y así realice los cálculos necesarios sobre la medición del aire.
Un vehículo con el sensor MAP averiado es perfectamente capaz de seguir funcionando, cosa que podremos observar con facilidad a detectar que la eficiencia del consumo disminuye muy claramente.
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