Con el paso del tiempo, las inclemencias meteorológicas, el calor, el frío o los golpes, la pintura de la carrocería de nuestro coche puede verse dañada y sobre todo sin brillo. Para lograr que la pintura se encuentre en el mejor estado durante más tiempo, es conveniente que realices labores de mantenimiento cada cierto tiempo. En este post queremos mostrarte cómo pulir tu coche paso a paso.
Para poder conservar la pintura en las mejores condiciones y que esta esté brillante durante más tiempo, debemos realizar una serie de tareas de mantenimiento que nos ayuden a ello, como es el caso de pulir nuestro coche de forma periódica.
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Aunque tu vehículo ya tenga algunos años, un buen pulido puede ayudarte a darle un nuevo aspecto para que siempre luzca como recién salido del concesionario. Además, ayudará a eliminar pequeñas imperfecciones que hayan podido producirse.
Qué materiales necesitas
Para poder realizar este procedimiento necesitarás una máquina pulidora y un producto específico para este fin. Para elegir correctamente la máquina, debes tener en cuenta que existen dos tipos:
- Pulidora de alta velocidad: permite un mejor acabado y su uso es profesional. Será ideal cuando ya tengas algo de experiencia en el pulido de tu coche.
- Pulidora de plato redondo: su acabado es bueno y es muy sencilla de usar, por lo que deberás usarla si es tu primera vez con este aparato.
Por otro lado, deberás contar con un producto adecuado para pulir tu coche. Para ello, encontrarás multitud de ceras que te ayudarán a conseguir un resultado brillante. Si quieres elegir la adecuada, deberás tener en cuenta el tipo de pintura de tu vehículo y los desperfectos que tenga la carrocería. No dudes en pedir información a un especialista en este tipo de productos.
Pulir tu coche paso a paso
A la hora de pulir un coche puedes decantarte por dos procedimientos, el primero de ellos es el manual, que aunque permite un mejor acabado es muy lento. Por otro lado, puedes utilizar una pulidora, esta te dará un resultado profesional en muy poco tiempo. En el caso de que la superficie a pulir sea pequeña es recomendable que realices el proceso de forma manual.
Podrás hacerte con una pulidora en cualquier tienda de automóviles, aunque también podrás alquilarlas en establecimientos dedicados a maquinaria. De esta forma no tendrás que comprar una, solo pagarla cuando la necesites.
Debes elegir un lugar adecuado para realizar el proceso, para ello, aparca tu coche a la sombra para evitar manchas y en una ubicación alejada de árboles para impedir que puedan caer elementos sobre la carrocería que arruinen el proceso.
Ahora toca lavar el coche usando agua y jabón y aclarar con abundante agua. Tras ello, seca bien toda la superficie con una bayeta o paño seco que no deje pelusas. Asegúrate de que no quede humedad antes de comenzar a pulir tu coche.
A continuación, aplica sobre la almohadilla un poco de producto específico para encerado. La cantidad debe ser la justa para realizar el proceso si quieres conseguir buenos resultados. En estos casos, es mejor que consultes las instrucciones del producto.
Tras ello, enciende la pulidora de manera que esta tenga una velocidad media. Ahora toca colocar la máquina sobre la carrocería del coche, la presión que deberás aplicar debe ser constante para poder conseguir un resultado uniforme.
Muévete por toda la carrocería realizando movimientos de delante hacia atrás insistiendo en las zonas con más arañazos hasta que estos desaparezcan. En el caso de que sea necesario puedes enjuagar la almohadilla para eliminar restos e impurezas.
Una vez acabado el proceso toca lavar bien el coche para eliminar cualquier resto que haya podido producirse durante el procedimiento de pulido. Por último y una vez limpio puedes aplicar una capa de cera usando de nuevo la pulidora a velocidad media, esta ayudará a mejorar el brillo y a proteger la superficie.
Pulir tu coche no es tan difícil, pero aun así siempre puede surgir algún imprevisto, para ello tu Seguro de coche MAPFRE cuenta con una amplia cobertura.
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