Si sospechas que es el catalizador de tu coche el que no te está dando el rendimiento correcto, no tardes en confirmarlo. A menudo, puede ser que la pieza se haya golpeado o dañado del uso, pero en otras ocasiones es posible que sea un fallo consecuencia de otro problema del motor u otros sistemas, así que lo mejor será averiguarlo rápidamente.
5 síntomas que hablan de un catalizador en mal estado
La misión del catalizador es reducir las emisiones que tu coche desprende al medio ambiente, por lo tanto, una avería o un mal funcionamiento de la pieza se traduce en un coche que contamina más pero también, que consume más. En definitiva, no funciona de forma correcta y debemos estar siempre atentos a los síntomas y anomalías para detectar el fallo cuanto antes.
Humo y mal olor
El síntoma más evidente y conocido de avería o fallo en el catalizador de un vehículo es el exceso de humo expulsado por el tubo de escape e incluso, el mal olor que provoca. Si observas que el tubo de escape de tu coche expulsa más humo del habitual y además, el olor es fuerte, es casi seguro que el catalizador presenta una avería, por lo menos, obstrucción o falta de limpieza.
Pérdida de potencia en el motor
Si notas que tu motor ha dejado de rendir como solía hacerlo y pierde fuerza en ocasiones concretas como al ralentí o en el momento de la aceleración, es fácil que el catalizador no esté funcionando de forma correcta o se haya estropeado a consecuencia de un fallo en el motor que ha acabado repercutiendo en el catalizador.
Problemas en las bujías o en el sistema de válvulas o inyectores, entre otros, hacen que la mezcla llegue al catalizador sin quemar, situación que hace que la pieza acabe quemándose y fundiéndose, dando síntomas de fallos evidente como es la falta de potencia.
Ruidos metálicos en el escape y parte inferior del coche
Cuando se oyen ruidos fuera de lo común en la zona del escape del vehículo y por debajo de él, es importante revisar el catalizador. Una fractura en el cuerpo de este elemento provoca ruidos y un filtrado deficiente.
Las causas por las que un catalizador puede romperse son muchas, pero una de las más comunes son los cambios de temperatura brusca, por ejemplo, cuando deben funcionar sobre hielo o nieve. El catalizador roto puede repararse o cambiarse según lo importante que sea la rotura.
Sobrecalentamiento del motor
El aceite o el anticongelante no deberían llegar al catalizador, pues al quemarse en esta zona, producen suciedad que obstruye la pieza y no le permiten funcionar con eficacia. El vehículo pierde potencia y el motor puede llegar a sobrecalentarse en esta situación, puesto que los gases no pasan con facilidad y quedan atrapados.
Un motor sobrecalentado tanto por un catalizador obstruido como por otras averías, te obliga a detenerte y es probable que no puedas reiniciar la marcha sin atención profesional que valore y/o repare el problema. En esta situación, agradecerás contar con la mejor asistencia en carretera para que los inconvenientes de tener que interrumpir tu viaje sean los mínimos. Para viajar seguro y tranquilo sin preocupaciones, deberías tener una póliza de Seguro de Coche con las coberturas necesarias.
Código de fallo en el ordenador de abordo
Los coches equipados con autodiagnosis tienen un código concreto para indicar fallos en el catalizador, por lo general, este chivato salta cuando el elemento baja su rendimiento por debajo de los mínimos previstos, indicando que algo no va bien en esta parte de tu coche.
¿Cuánto cuesta reparar el catalizador?
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El catalizador es una pieza esencial para el buen funcionamiento de tu coche por lo que si esta estropeado, dañado o tiene cualquier problema que no le permite hacer su función con eficiencia, lo mejor, es acudir a un taller de confianza para valorar el problema.
No siempre es necesario cambiar el catalizador, a veces, una limpieza a fondo puede ser suficiente para reparar la pieza. Es importante que un profesional valore la situación en la que se encuentra y descubra cuál es el problema para proponerte la mejor solución para tu caso.
El cambio del catalizador tiene un precio medio de unos 500 euros, según los presupuestos del sector, pero todo depende del modelo y del precio de la mano de obra para hacer esta sustitución. Si solo se trata de limpiarlo o repararlo, es fácil que te cueste menos, pero no siempre es suficiente.
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