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A la hora de viajar en coche, una de las cosas más complicadas es decidir el tipo de comida para llevar, y es importante entender que no se trata de una decisión sin importancia, ya que viajando es necesario contar con una comida sencilla, práctica y que no precise refrigeración ni calentado, además de ser nutritiva para poder reponer fuerzas ante un potencial viaje largo que puede ser agotador.

Criterios sugeridos para elegir correctamente la comida para viajes

Aparte de tratarse de una comida que guste al conductor y los ocupantes, conviene fijarse en los siguientes criterios:

En el caso de viajar con niños, hay que ser especialmente meticulosos en la elección.
Evitar los huevos en su elaboración (posible fermentación y posibles indigestiones).
Ideal si se puede transportar en un “Tupper”, por su practicidad.
Que aguante bien el tiempo del viaje sin refrigeración (para que no se estropee).
Que contenga una buena cantidad de nutrientes, para poder recuperar energías sin tener que comer grandes cantidades.
Que sea fácil de comer y a ser posible sin cubiertos al menos parcialmente (por la incomodidad que podría generar comiendo en marcha).
Que soporte bien el calor (fundamentalmente en verano).
Recomendable que sea una comida ligera, para evitar que se puedan producir somnolencias.

Algunas recomendaciones de alimentos para viajes en coche

Fuente: revista Motor Mundial

De acuerdo con los anteriores criterios, una posible pequeña lista de alternativas podría ser la siguiente:

Empanadas: son fáciles de comer y preparar y aportan una importante dosis de energía (también para los niños).
Ensaladas frías: al comerse frías no hay preocupación por que se puedan estropear sin refrigeración. Son bastante nutritivas y se pueden combinar de múltiples maneras.
Fruta fresca: evita tener que cocinar y se recomienda usarla como un simple tentempié ya que siendo nutritiva no completa para cubrir un largo viaje. Convienen frutas fáciles de comer (plátanos, manzanas, mandarinas, peras, …). Los frutos secos son también una buena alternativa.
Sándwiches: fáciles de confeccionar y pueden ser muy nutritivos. Conviene preparar sándwiches bien cargados y complementados para que aporte buena energía y produzcan la satisfacción necesaria.
Sopas frías: pueden llegar a ser muy nutritivas y saciantes con ingredientes adecuados, y se pueden beber por el camino como si se tratara de una bebida.
Wraps: alternativos a los sándwiches, con una elaboración fácil también y muy prácticos para comerlos durante el viaje, procurando que sus contenidos sean saludables y que no se estropeen con el calor.

Fuente: revista Motor Mundial

Esperamos que todas estas indicaciones y potenciales recomendaciones alimenticias a la hora de viajar en coche sean del gusto general, si bien conviene recordar que hay que planificar muy detalladamente la comida a llevar en un viaje en coche, para evitar problemas como hemos descrito y sobre todo por comodidad, facilidad, sanidad y seguridad también en la conducción.

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