La sexta generación del Opel Corsa representa una revolución tanto comercial como industrial y tecnológica en la marca alemana. Es el primer turismo desarrollado íntegramente bajo los auspicios del grupo PSA (grupo formado por Peugeot, Citroën, DS Automobiles, Opel y Vauxhall), por lo que se aprovecha de muchas soluciones de su primo hermano, el Peugeot 208, lo cual le viene de cine.
Con una organización amoldándose y varios acuerdos que pueden fructificar en breve, el Opel no para de crecer y ya han sido nada menos que nueve productos los que han evolucionado últimamente.
El Opel Corsa es el último modelo que ha llegado, constituyendo la sexta generación de un vehículo que tiene una importancia destacada para nuestro país.
Desde 1982 se han producido 14 millones de vehículos en Zaragoza, de los cuales, 11 millones han sido Corsas. Junto a los 2,2 millones producidos en otras plantas europeas. El Corsa llega a la friolera de los 13,2 millones de unidades producidas en estos 36 años de existencia, lo que no deja de ser una gran garantía sobre su calidad.
El modelo más importante de Opel
El Opel Corsa es, sin duda, el icono de la marca y el vehículo que, a lo largo de los años, ha proporcionado los mejores resultados comerciales a Opel. Estamos hablando de un utilitario venido a más, con unas dimensiones que igualan en anchura al anterior (1,74 m), gana un poco en longitud, y pierde altura, con lo que su atractiva imagen gana en dinamismo.
Desde luego, el Opel Corsa tiene un estilo muy conseguido, pero, además, varía entre distintos acabados. Por ejemplo, los paragolpes de la terminación GS Line son bastante diferentes a los de los acabados Edition y Elegance. A todo ello, se prevé que cerca de la mitad de sus compradores recurran a los acabados bitono, que en este modelo ya están disponibles.
El espacio para los pasajeros traseros no es excesivamente generoso, quizás, porque como nos afirmaron por activa y por pasiva, la marca había pretendido proporcionar a la postura del conductor un espacio mayor, además de situar más bajo el puesto de conducción.
El aumento en la longitud del coche (4,06 m) se justifica en el aumento de la capacidad del maletero, que gana en esta sexta generación 24 litros, situándose en los 309, una buena cifra para su segmento.
Uno de los aspectos más importantes que se han mejorado en el desarrollo del nuevo Opel Corsa ha sido el peso. En total y con relación al anterior, se registra un ahorro en peso de hasta 108 Kg en el mejor de los casos.
Fuente: Motor Mundial
Tres acabados más tecnológicos
La gama inicial del Corsa se alimenta de los tres acabados anteriormente mencionados: Edition, GS Line y Elegance, estos dos últimos al mismo nivel, pero con diferente personalidad: el GS Line con un acabado más deportivo y Elegance con uno más serio.
Con las diferencias iniciales, y la posibilidad de completar los equipamientos con paquetes bien definidos, el Corsa se define como un vehículo altamente tecnológico.
La lista de elementos es larga, solo destacar el sistema de reconocimiento de señales de tráfico, el limitador inteligente de velocidad, la frenada automática de emergencia o el asistente automático de carril, salpicadero digital con pantalla central de 10 pulgadas, freno de mano eléctrico o los asientos de cuero con regulación eléctrica, calefacción e incluso, función masaje, entre otros muchos más.
Las comunicaciones son de última generación, con llamada de emergencia o llamada por avería, incluidos diagnósticos del vehículo, navegación conectada, servicios de aparcamiento o viaje y otras prestaciones que nos permitirán gestionar de la mejor forma los desplazamientos.
Mejora en la eficiencia con relación a la generación anterior
Dos son los motores térmicos que se ofrecen ahora en la gama del nuevo Corsa. Uno de gasolina de 1,2 litros, tri-cilíndrico con tres niveles de potencia: 75 CV para la versión atmosférica y 100 o 130 CV para las versiones sobrealimentadas; y otro motor diésel de 1,5 litros y 100 CV.
Estos motores se completan con cajas de cambio manuales de 5 y 6 relaciones y una automática de 8 marchas destinada, de momento, para los motores de 100 y 130 CV de gasolina, el primero con el acabado Elegance y el segundo con la terminación deportiva GS-Line.
- Motor de 75 CV y acabado Elegance (16.470 euros): con tres personas a bordo y algunas maletas nos desplazamos por la provincia de Zaragoza y por carreteras convencionales, la verdad es que este motor tricilíndrico es voluntarioso, pero no puede hacer demasiado en brillantez con su par modesto de 120 Nm a 2.750 rpm.
En el recorrido, tuvimos que trabajar mucho sobre el cambio de marchas y elevar en exceso el régimen para obtener más potencia. Lo que si nos convence es el comportamiento del bastidor, bastante ayudado por la falta de empuje del propulsor, que le pone en pocos aprietos.
- Motor de 100 CV y acabado Elegance de gasolina con cambio automático (21.700 €): las sensaciones son infinitamente mejores. El motor, sobrealimentado, mejora los valores de par, con 205 Nm, obtenidos además a 1.750 rpm, lo que significa un aumento sustancial. Además, la sobrealimentación mejora de forma notable la entrega de potencia y el cambio de 8 relaciones llega para redondear los excelentes resultados. Sin duda este motor de 100 CV de gasolina es la opción más interesante, con permiso del 100 CV diésel que no tuvimos la oportunidad de conducir, pero pensando que es un coche pequeño y más caro y que el Gobierno va a subir el precio del gasóleo…
A todo esto, hay que mencionar que el Opel Corsa ofrecerá en 2020 una versión eléctrica pura con una potencia de 136 CV y unos precios que van desde los 29.900 hasta los 32.750 euros en función de los acabados.
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