En la Unión Europea, la matrícula de un coche es, de forma generalizada, el sistema más rápido de identificación de un conductor o del propietario de un coche.
Fue en 2015 cuando nació la directiva de la UE sobre infracciones de tráfico, permitiendo desde dicho momento el traspaso de información para poder sancionar a los infractores en materias de seguridad vial, y constituyendo así sofisticadas bases de datos alimentadas por todos los estados miembros de la Unión Europea.
La matrícula es en consecuencia el carnet de identidad de los conductores en carretera, siendo actualmente el método por excelencia para asociar una determinada persona a un vehículo, dejando atrás aquellos tiempos en los que se viajaba fuera de España con el coche y no nos teníamos que preocupar por las multas de tráfico, que ahora si llegan, sobre todo si superan los 70€ o si están relacionadas con excesos de velocidad u otras faltas reconocibles como graves.
Además de ser la matrícula un importante sistema de identificación europeo, hay muchas otras cosas detrás de ellas, ya que todo lo que ocurre en la vida de un vehículo queda registrado con su matrícula (reparaciones, cagas financieras, inspecciones, etc.).
Gracias a todos estos avances actuales, tanto la policía como los concesionarios de automóviles, las instituciones financieras e incluso los consumidores pueden revisar al detalle los antecedentes de un vehículo hasta poder extraer así las conclusiones necesarias.
¿Qué historial se puede conocer a través de la matrícula de un coche?
Efectivamente la matrícula registra el historial completo de un coche (inspeccionado, reparado, robado, propietarios anteriores, cargas económicas, etc.). De hecho, los coches, al igual que otro tipo de bienes, son un activo que en el mundo digital se representan por su número de matrícula.
Si un propietario decide vender su coche es muy importante para el comprador conocer cualquier dato sobre el vehículo que compra, para evitar otro tipo de problemas posteriores. El historial de un coche es un importante aspecto para el valor del vehículo y su seguridad, ya que la falta de información sobre este afecta a varios asuntos:
- Afecta directamente al cálculo correcto del valor del coche: es posible que el coche y su matrícula tengan un valor diferente, ya que el mercado decide esto en función de su antigüedad, la marca, el modelo, sin considerar su historia o los incidentes que haya podido tener.
Por ejemplo, un coche que haya sido robado podría tener el mismo valor que uno de iguales especificaciones y, sin embargo, debería tener un valor más bajo, lo mismo que ocurre con las potenciales cargas financieras o daños que pudieran afectar al valor real del coche.
- Afecta también a la seguridad vial: el estado y su historial podría traducirse en una seguridad vial reducida si se pudiera comprobar que se han producido debilidades importantes.
- Afecta al valor residual y al precio posible de venta: ante un historial negativo de un coche, cualquier consumidor querrá pagar menos por él, cosa normal y que con la velocidad actual de la tecnología seguramente tenderá a crecer.
Para conocer al detalle el historial de un coche a través de su matrícula se pueden solicitar todo tipo de informes en tráfico, aunque con una capacidad limitada de obtención informativa, ya que los mismos se basan en las llamadas informaciones públicas.
Además, existen, incluso por Internet, múltiples empresas con las que se puede contratar informes más completos para ver de forma ordenada todos los eventos que el coche haya tenido en su vida, combinando datos de diversas fuentes.
Tan importante es conocer toda la información que podemos tener de un vehículo según su matrícula, como tener un buen Seguro de Coche MAPFRE para poder estar protegido en todo momento.
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