Revisión completa del Toyota GT86

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El Toyota GT86 es un interesante deportivo que combina toda la calidad y fiabilidad de la marca japonesa con un diseño atractivo y unas prestaciones sorprendentes.

Resumen del contenido

  1. Las claves del Toyota GT86
    1. Unas medidas de impresión
    2. El motor del Toyota GT86
    3. Interior del Toyota GT86
    4. Equipamiento de serie
    5. Toyota GT 86 y la seguridad
    6. Los rivales del Toyota GT86
    7. Configuraciones personalizables
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El Toyota GT86 es un excitante deportivo con un atractivo diseño y una conducción espectacular. Su potente motor empuja una estructura ligera pero resistente que se comporta de manera muy ágil en carretera.

Las claves del Toyota GT86

Son muchos los encantos de este deportivo de la gran marca japonesa, cuyos faros LED, robusto parachoques trasero y grandes llantas le dan un toque personal e inconfundible.

Unas medidas de impresión

El aspecto externo ha sido cuidado al máximo por los ingenieros de la marca para ofrecer un deportivo atractivo pero que a la vez sea funcional. En sus 4,24 metros de longitud y 1,775 metros de anchura caben dos personas adultas sin problema en las plazas delanteras y dos niños en las traseras. Por su parte, con una altura de 1,32 metros y con una línea estética muy trabajada, el vehículo ofrece una gran aerodinámica y un centro de gravedad bajo que redunda en una mejora a la hora de tomar curvas.

El maletero ofrece una generosa capacidad. Se trata de un espacio inferior al de un automóvil compacto habitual, pero que sin embargo resulta bastante útil para tratarse de un deportivo. Además, al dar los asientos traseros hacia adelante se consigue una superficie mayor que supera el metro de longitud.

El motor del Toyota GT86

El propulsor que monta el Toyota GT86 es de tipo bóxer, es decir, cuenta con cilindros horizontales opuestos en los que cada biela tiene su propia muñequilla en el cigüeñal. Al situarse de manera horizontal, se logra un centro de gravedad más bajo, mientras que al contar con un cigüeñal más corto que los tradicionales motores en línea, también es más rígido y resistente. Otra de sus ventajas es que cuenta con un equilibrado natural mejor.

El motivo por el que su uso no está extendido es porque normalmente requiere una mayor ingeniería y resultan más costosos. Es por esta razón que su empleo suele limitarse a deportivos de marcas como Porsche o Subaru.

Para frenar el empuje de la maquinaria el Toyota GT86 monta unos frenos Brembo con discos de un considerable tamaño y que tienen un rendimiento altamente contrastado. La velocidad máxima del coche en su versión automática es de 210 km/h, mientras que su capacidad de aceleración hace que pase de 0 a 100 km/h en menos de 10 segundos, concretamente en solo 8,2.

Estas prestaciones se ven superadas si se opta por la opción manual, la cual alcanza los 226 kilómetros por hora y 7,6 segundos para llegar a los 100 km/h. En lo que respecta a su consumo, según sea el cambio de marchas las cifras varían ligeramente. En el modelo manual, el consumo mixto es de 7,8 litros cada 100 kilómetros, mientras que se reduce a 7,1 litros en el caso de la caja de cambios automática.

Interior del Toyota GT86

El espacio interior del Toyota GT86 destaca por su sencillez. Se trata de un coche cómodo pero que no incorpora grandes accesorios que perjudiquen el comportamiento del automóvil en la carretera. Aunque se trata de un habitáculo austero y sin grandes decoraciones, la calidad de sus acabados es elevada.

Los materiales son de gran nivel y el tacto es satisfactorio. Una pantalla central de 4,2 pulgadas sirve para controlar los mandos del volante y las funciones de conducción. Especialmente interesantes es la tecnología que permite informar al conductor el momento idóneo para cambiar de marcha sin necesidad de que preste atención al salpicadero. Los ingenieros han ideado un sistema que cuando el propulsor alcanza determinado régimen hace que se produzca un pitido y que se encienda una luz roja. De esta manera se puede exprimir al máximo las características del coche.

Equipamiento de serie

En España solamente se puede elegir un nivel de acabado, el Sport. Sin embargo el Toyota GT 86 incluye un gran número de accesorios y complementos de serie. Nos estamos refiriendo, por ejemplo a unas llantas de 17 pulgadas, faros antiniebla delanteros, luces de encendido automático, faros LED para el día y faros delanteros de xenón cuando cae la noche.

También dispone de retrovisores eléctricos con calefacción, climatizador automático bizona y volante revestido en cuero (este elemento también se encuentra en la palanca de cambios y el tirador del freno de mano). En lo que respecta a la tecnología, no falta un sistema de audio muy completo con hasta seis altavoces y una pantalla táctil a la que se le pueden conectar distintos dispositivos por medio de bluetooth o de una toma USB.

Toyota GT 86 y la seguridad

Cuando hablamos de un coche deportivo diseñado para surcar la carretera y disfrutar de la sensación de conducir normalmente nos referimos a automóviles con una gran potencia y un gran agarre en las curvas. Es por esa razón que se debe de cuidar al máximo no solamente el apartado del motor, sino que también los frenos y los sistemas de ayuda a la conducción son muy relevantes.

En el caso del GT 86, se dispone de serie de un asistente de frenada de emergencia y de un innovador control de estabilidad. También hay un control de tracción y los siempre interesantes frenos ABS que evitan el bloqueo de las ruedas. En el apartado de seguridad pasiva llama la atención que además de los tradicionales airbags frontales de conductor y pasajero, se incluyen además airbag de rodilla, laterales y de cortina.

Los rivales del Toyota GT86

Existe una amplia competencia en el sector de los deportivos y sobre todo en los que están en torno a los 35.000 euros que cuesta el de Toyota. El rival directo del Toyota GT86 es el Subaru BRZ. La razón es que ambos vehículos son el resultado de un acuerdo entre los dos fabricantes y que por lo tanto comparten un gran número de piezas.

Otros automóviles que compiten en el mismo mercado son el BMW Serie 2, el Volkswagen Scirocco, el Nissan 370Z y, un paso más allá, el Audi TT. En el caso de los deportivos europeos, el tacto no es tan salvaje como en el Toyota, aunque incorporan un interior muy confortable. Por su parte el Nissan ofrece una buena potencia y sería una alternativa igualmente interesante.

Configuraciones personalizables

El Toyota GT86 puede ser personalizable según los criterios del comprador. De momento, las opciones se limitan al tipo de motor y al color de pintura, pero se espera que en el futuro se amplíe la gama. En la web de Toyota se puede configurar de manera rápida el coche según los gustos de cada persona. Se trata de un servicio ágil y muy visual que ayuda a que las personas interesadas en el vehículo puedan conocer cómo sería el aspecto de la opción que elijan y cuál sería su precio.

El Toyota GT86 es un interesante deportivo que promete grandes sensaciones en la carretera. El Seguro de Coche MAPFRE es el complemento ideal para surcar el asfalto sabiendo que estás protegido y que cuentas con un gran equipo de profesionales que te respalda.

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