El derivado de turismo cuenta con una serie de beneficios que lo convierte en la mejor opción en determinadas situaciones:
Familias numerosas
Ofrece más plazas de pasajeros que un turismo convencional (hasta nueve), lo que hace que este tipo de vehículos familiares sean la mejor elección para familias numerosas, sobre todo cuando necesitan instalar más de dos sistemas de retención infantil, grupos de amigos de viajes, etc.
Emprendedores
Para muchos autónomos que se deciden a crear su propia empresa, los vehículos mixtos adaptables son la mejor solución para el transporte de mercancías sin necesidad de obtener para ello ningún carnet especial.
Además, pueden deducirse un mínimo del 50% de las cuotas del IVA siempre que se encuentren dados de alta en el Censo de actividades empresariales y que, por supuesto, el vehículo se utilice para realizar la actividad económica en la que se encuentren inscritos.
Viajeros
Se pueden usar de forma simultánea para transportar mercancía y pasajeros, lo que hace que estos automóviles sean una verdadera maravilla a la hora de preparar logísticamente un viaje en coche.
En todos los casos hay un beneficio añadido que es de gran ayuda, ya que atañe al ámbito económico. Tanto una familia numerosa como un emprendedor o un viajero necesitan ahorrar costes. Este tipo de vehículos están exentos de pagar el impuesto de matriculación, es decir, un porcentaje sobre el precio total del vehículo que, en muchos casos, puede suponer un ahorro de entre 1.500 y 2.000 euros. Aunque por otra parte están sujetos a ciertas limitaciones a la hora de matricularlos.
Normativa y características especiales
Por otra parte, hay una serie de características especiales de estos vehículos que conviene tener en cuenta para no llevarnos sorpresas desagradables si optamos por esta opción.
- La altura de un vehículo mixto adaptable desde el suelo hasta la parte de la estructura del techo es de 1,80 metros como mínimo. Es decir, es más alto que un turismo, y también más pesado, lo que los hace que sean más inestables y, por ende, menos seguros.
- Límite de velocidad Una de las cosas que más molesta a los conductores de vehículos mixtos adaptables es la limitación de velocidad. En autovías y autopistas, la velocidad máxima a la que pueden circular estos automóviles es de 100 kilómetros por hora (en lugar de los 120 fijados para el resto de turismos). En carreteras convencionales, cuando tengan un arcén pavimentado de 1,50 metros o más de anchura, el máximo disminuye a 90 kilómetros por hora. En el resto de vías fuera de poblado, su limitación es de 80 kilómetros por hora.
- Los vehículos mixtos adaptables no pueden circular por un carril reversible ni Bus VAO.
- Periodicidad de la ITV. Debido a la condición especial que tiene este tipo de vehículo, debe pasar su primera ITV a los dos años después de su primera matriculación, y no a los cuatro años, como sucede en el resto de turismos. A partir del sexto año, hay que pasar la inspección técnica anualmente, y cuando cumpla los 10, cada seis meses.
- Durante los cuatro primeros años posteriores a la matriculación, no se puede cambiar la titularidad del vehículo. Si se necesita cambiarla, hay que abonar el impuesto de matriculación que supuso un ahorro en un primer momento.
No obstante, pasados cuatro años desde la matriculación es posible cambiar la categoría de vehículo mixto adaptable a turismo, con lo que las limitaciones anteriormente citadas se eliminarían.
Además de decidir qué tipo de vehículo comprar, hay que hacerlo con las mejores garantías. El Seguro de Coche MAPFRE ofrece las coberturas más completas del mercado y además te permite dar hasta tres siniestros sin subida de precio.
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