LO QUE DEBES SABER… |
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Lo recomendable a la hora de comprar coche es guiarse por las necesidades y el presupuesto, pero cuando las necesidades de espacio y practicidad no son lo primero, nos podemos guiar por el corazón más que por la razón, y comprar un coche de capricho, con una gran carga de diseño.
No es algo malo siempre que te lo puedas permitir, por razones de falta de practicidad y económicas ya que un coche de capricho normalmente es más caro que los coches convencionales de la misma categoría. Además, hay que tener en cuenta que el precio del seguro también será más elevado. A su favor está la imagen que otorga al conductor de persona atrevida y más interesante que la imagen que da un coche más funcional. Otra ventaja es que su precio no se devalúa tanto como en el caso de los coches más baratos y funcionales del mercado. Los coches de capricho son coches con estilo, con un diseño especial, o con características que los diferencian de los demás.
Los «coches de capricho» más conocidos suelen ser los vehículos con estilo deportivo de cada segmento, podríamos citar al Mazda MX-5, al Audi TT, o al deportivo Porsche 911. Entre los coches de capricho “más cercanos” y más vendidos actualmente encontramos el Mini, el Fiat 500 y el Volkswagen Beetle. Los tres tienen en común las altas posibilidades de personalización, mucho estilo, frescura y un diseño que no pasan de moda: entre lo antiguo y lo moderno.
El Mini es uno de los coches de capricho que menos se devalúa con el paso del tiempo. En el mercado de segunda mano sigue manteniendo una gran aceptación. Es un icono del diseño británico y acaba de incorporar a sus filas un nuevo modelo de cinco puertas por primera vez en la historia de la marca.
El Fiat 500, por su parte, es uno de los coches más «cool» para la ciudad con muchas posibilidades de personalización y un estilo coqueto italiano. El Volkswagen Beetle es la reedición en formato moderno de uno de los pilares en la historia de la automoción alemana y rememora al primer modelo que sigue siendo un referente de estilo.
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