Actualmente, el coche conectado puede comunicarse con otros dispositivos que se encuentran en el interior o exterior del vehículo, tanto con los demás vehículos que circulan por la vía como con las infraestructuras que hay en ellas
Tecnologías del coche conectado que podemos disfrutar en la actualidad
El desarrollo tecnológico en este campo permite crear equipamientos que mejoran la usabilidad del coche, aportando una seguridad extra al Seguro de tu coche MAPFRE de tu coche, además de comodidad y diversión.
Entre las tecnologías más revolucionarias que están operativas en la actualidad destacamos las siguientes:
Reconocimiento facial
La tecnología de reconocimiento facial lleva ya varios años implantada en algunos coches, como Jaguar, BMW, o Tesla. Se utiliza para desbloquear el vehículo, y también para detectar expresiones faciales que puedan revelar que el conductor tiene fatiga.
Los resultados en este campo son muy interesantes. Por ejemplo, el sistema OMRON, que funciona mediante infrarrojos, es capaz de monitorizar los movimientos de la cara y los ojos del conductor y, si detecta algo fuera de lo normal, emite una alerta sonora.
Información proyectada en el parabrisas
Head-up display (HUD por sus siglas en inglés) es un sistema que proyecta la información que el conductor necesita directamente sobre su campo de visión, es decir, en el parabrisas del coche. Gracias a ello, el usuario puede consultar parámetros como la velocidad, las indicaciones del GPS o los límites de velocidad sin tener que apartar la vista de la carretera.
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Su funcionamiento se basa en una serie de espejos que se combinan para proyectar los datos a la altura de los ojos sin entorpecer la visión durante la conducción.
Apertura del coche con el smartphone
Una de las características de los coches conectados es la posibilidad de abrir el coche con un smartphone usando tecnología NFC (Near-Field Communication), un protocolo de identificación por radiofrecuencia (RFID), que cuenta con un alto nivel de seguridad.
Su funcionamiento es sencillo: el smartphone tiene almacenada una clave. Al acercarlo a un área concreta del coche equipada con sensores, éste reconoce el teléfono del propietario y desbloquea las puertas. Una vez dentro, el usuario puede arrancar el motor colocando el móvil en la plataforma de carga inalámbrica y pulsando el botón de Start-Stop.
Buen ejemplo de ello es Perfectly Keyless, la llave virtual creada por la empresa alemana Bosh.
Asistentes de voz
Android Auto o Apple CarPlay son los dos sistemas que permiten conectar el smartphone al coche y así manejarlo con los controles de este.
Control del móvil con los mandos del coche
MirrorLink es un estándar que permite controlar el móvil desde el cuadro de mandos del coche, la pantalla principal o los botones del volante. Podría decirse que es un complemento a Android Auto o Apple CarPlay, ya que ambos se pueden usar con este sistema.
Esta tecnología duplica lo que se ve en la pantalla del smartphone en el sistema audiovisual del coche, de manera que se pueden usar las funciones del primero sin tener que apartar la vista de la carretera.
Acelerador háptico
El pedal háptico consiste en un pedal que funciona bajo la tecnología háptica, que es aquella que recrea el sentido del tacto mediante la aplicación de vibraciones y movimientos a la persona.
Cuando el conductor pisa el acelerador, el sistema le avisa, mediante vibraciones, si lo está haciendo con exceso de presión o si debe cambiar de marcha. Además, en vehículos equipados con GPS, el pedal inteligente es capaz de reconocer señales y asistir a la conducción en función de las mismas o del trazado de la vía.
Coches que aparcan solos
Los coches con aparcamiento automático equipan unos sensores ubicados en los paragolpes que determinan si la distancia y el hueco son aptos. El conductor tiene que presionar un botón para que el vehículo comience a medir el espacio. Si detecta que es suficiente, comenzará a dar instrucciones al usuario para que lo aparque correctamente.
Pero la cosa no queda ahí. Además, hay sistemas que evitan que el usuario tenga que participar en las maniobras. El Audi Garage Parking Pilot, por ejemplo, lleva automáticamente el coche a una plaza vacía mediante el uso de un smartphone.
Faros que proyectan gráficos
Una de las grandes innovaciones en lo que a coches conectados se refiere son los faros matriciales inteligentes, capaces de proyectar imágenes en el suelo para ayudar al conductor.
Por ejemplo, pueden mostrar una flecha con el sentido de la vía, un símbolo de hielo si el pavimento está resbaladizo, el ancho del vehículo para verificar si éste cabe por un paso estrecho, etc.
Cámaras en vez de retrovisores
Este sistema viene a reemplazar los espejos por cámaras de alta resolución que están conectadas a unos monitores ubicados en el interior del vehículo. Además de mejorar el campo de visión del conductor, estos retrovisores eliminan los ángulos muertos y se adaptan para ofrecer una vista ampliada cuando el vehículo maniobra o circula marcha atrás.
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